El ICAC aumenta el número de sanciones por no depositar las cuentas anuales
Los expedientes sancionadores por no depositar cuentas anuales en los registros mercantiles aumentaron un 82% en 2022.
Los expedientes sancionadores por no depositar cuentas anuales en los registros mercantiles aumentaron un 82% en 2022.
Mario Cantalapiedra - Economista
El Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), organismo autónomo encargado de la supervisión y elaboración de las normas en contabilidad y auditoría en España, incrementó durante 2022 los expedientes sancionadores a las empresas que no cumplieron con la obligación de depositar sus cuentas anuales.
El ICAC está capacitado para sancionar a las sociedades cuyo órgano de administración incumple la obligación de depositar las cuentas anuales en los registros mercantiles dentro del plazo establecido, en virtud de lo que dispone el artículo 283 de la Ley de Sociedades de Capital. Asimismo, el Real Decreto 2/2021, precisa el plazo para la tramitación de este procedimiento sancionador y los criterios para la imposición de las sanciones.
De forma general, la sanción a imponer se determina atendiendo a la dimensión de la empresa, en función del importe total de las partidas del activo y de su cifra de ventas, según la última declaración presentada ante la Agencia Tributaria, pudiendo oscilar entre los 1.200 y los 60.000 euros por cada año de incumplimiento, en el caso de las empresas más pequeñas, y llegar hasta los 300.000 euros para las sociedades que facturen por encima de los 6 millones de euros.
Pues bien, según los datos aportados por el ICAC en su Memoria Anual de Actividades correspondiente a 2022, el número de expedientes sancionadores resueltos en materia de depósito de cuentas anuales durante el pasado ejercicio fue de 300 frente a los 165 resueltos un año antes, lo que supone un incremento del 82%. Aunque todavía siguen siendo pocos expedientes, resulta muy llamativo el aumento que se ha producido en términos relativos.
En cuanto al importe de las multas impuestas a las empresas por la no presentación ascendió a 791.770,63 euros en 2022, una media de 2.639,24 euros por expediente.
Puede ser este un nuevo “aviso a navegantes” para las empresas que no depositan sus cuentas. A las otras consecuencias negativas que puede traer este incumplimiento como, por ejemplo, el cierre de hoja registral, el impacto negativo en los informes comerciales o las mayores dificultades para acceder a la financiación bancaria o a la cobertura del seguro de crédito, se puede unir ahora la mayor probabilidad de recibir una sanción.